¿Cómo estás? Porque recién me saqué esa culpa al otro jueves, cuando llegué puntual.
Me imagino. Y me duró una semana. Es que está perfecto, yo trabajo con la culpa de los otros.
Yo soy como una especie de madre judía, ¿viste? Y yo no dije nada, me la aguanté.
Pero me parece muy bien, me parece muy bien. Bueno, muchos temas para charlar.
De más está decir que invito también a los oyentes, preguntas, opiniones, lo que sea, 11 50 05 07 10.
Señor Guillermo Moreno, ¿cuándo fue la última vez que hizo el amor? ¡Ay! ¡Estábamos hablando de eso! Es verdad.
Ese fue un chiste, el mejor chiste de ese se lo escuché a Puliese.
¿Te acuerdas de Puliese? Sí, cómo no. Y entonces se le hacía a Gainsbourg la pregunta.
Sí. Que al invitado le decía cuál fue la primera vez.
A la primera, sí. Y todo el mundo estaba esperando a Puliese, decía las obviedades de un gobierno radical, la iba llevando.
El viejo era un viejo inteligente. Y entonces, bueno, Gainsbourg con mucho respeto le dice, bueno, ¿usted sabe cuál es la última pregunta de este programa? Sí, la sé.
¿Cómo fue su primera vez? ¿Cómo fue su primera vez? Y lo mira Gainsbourg, Puliese le dice, pibe, no me acuerdo, la última, me voy a recordar la primera.
Con lo cual así estábamos, digamos. ¿No te acordás? No, no, no.
No, no, no. No, no, no, no. No, no, no. Estábamos chichoneando un poco.
El peronismo, el peronismo siempre. Viste que no, el peronismo. Todo es el peronismo.
Todo es su manera y alguna otra. Es que, perdóname, hay historias con esto.
Yo me acuerdo, por ejemplo, de una frase histórica, después te la voy a decir en privado quién es la mujer, pero es conocida y vive, de la época de los 70 del peronismo, una mujer de armas tomar, que la famosa frase que dice, un polvo no se le niega a ningún compañero.
Tengo otra anécdota. Esto es así. Yo casi ahí me hago peronista, te digo, pero bueno.
Yo te cuento, en mi oficina, obviamente, de secretario ya de comercio, no entraba cualquiera, se golpeaba.
La que podía entrar sin golpear al mediodía era mi ex mujer, porque conocía a toda la tropa, imagínate, todo lo que estaban ahí lo conocía ella, ya entraba siempre.
Y que iba al baño, mi baño privado, y yo, y Marta, la actual.
Entonces? Ya estabas ahí. No, no, no, ya me? tuve 10 años de? De diferencia.
Sí, sí, sí. Para blanquear, digamos. No, no, no, no, si Marta es viuda, Marta es viuda.
No, no, no, no, yo en realidad era amigo del marido.
Me estás jodiendo. No, claro. Viste qué pasa, vos te enamoras de las esposas de los amigos.
No, no, esto fue al revés, pasó muchos años hasta que? Otro político hizo lo mismo.
No, no, pero fueron muchos años después, muchos años después, pero la relación era con el marido de Marta.
Estábamos en el equipo económico, no, no, después de muchos años, yo tuve 10 años separado y Marta, no, no, no, ya tenía bien asentada su viudez, ya había? Bueno, de otro día te la cuento, pero entonces yo estaba con la? la Coca Sally, Marta obviamente miraba a la ajena, las chicas se la mostraban, y ve que viene la Coca Sally, y viene la Coca Sally con ochenta y pico.
No entiendo, pará un poquitito, vos eras el estudio de comercio, ya estabas con Marta.
Sí, era mi esposa, sí. ¿Y qué mierda iba a ser la Coca Sally? A tener una reunión de trabajo.
¿Pero qué trabajo? ¿Qué ibas a pesarle las lulas? Bueno, ahí está el tema, eso es lo que le va a haber pensado Marta.
¿Qué? Yo hubiera pensado la misma. La famosa balanza comercial, ¿no? Claro, entonces viene la Coca Sally impecable, extraordinaria, una cosa? Te gustó.
Que hay dos zappings que yo me quedo clavado, cuando es el gol de Maradona, cualquiera sea él, y cuando es una película de la Coca.
Total. Estás haciendo el zapping, aparece la Coca y ya está.
Entonces viene la Coca, empieza, blip, blip, hablamos, bueno, le estaba pasando, bueno, teníamos una serie de dificultades, ella tenía, y de repente se abre la puerta, entra Marta, yo tenía mi sillón, un sillón en frente de un cuerpo y uno de tres cuerpos a mi derecha, ahí se sienta la Coca.
Entonces, se sienta ahí, hablamos así, a mi cara? O sea, en frente tuyo no, se sentó al lado tuyo.
Yo tenía una mesita ahí al lado. Ella quería que vos la observes bien.
Entonces viene Marta, entra, ni permisos, ni hola, ni nada, pum, y se sienta en el sillón de enfrente, prolijita ahí, se sienta ahí sin hablar, sin decir nada.
Entró al despacho, abrió la puerta, entró y se sentó. Y entonces la Coca se pone nerviosa, empieza a mirarme, mira a mí, y se viene aquí en el pase, no sabía si seguir o no seguir, y yo la veo que se pone? Entonces al final la Coca dice, la Coca, y la señora, le digo, la señora es mi mujer.
Y la Coca dice, y entonces, ah, señora, no, Coca, le dice, a este yo lo conozco, le dice, con vos no lo dejo solo, con vos no lo dejo solo.
Grande Marta, brillante, brillante obviamente. Se reíeron todos, pero ese día entró y se sentó, dijo, ah, con vos no lo dejo solo, porque sabe, y bueno, la Coca.
Es así, era la Coca. Bueno, ahora sí, después de este recreo tenemos un montón ya de mensajes.
¿Alguien te pregunta por qué baja el dólar? Yo diría, por qué, claro, por qué baja el dólar.
Recién te preguntaban por qué subía el dólar, digo, no, no está subiendo, está bajando.
¿Por qué baja el dólar? Este es un gobierno que hace contrario a un censo lo que tiene que hacer el sistema capitalista.
No hay sistema capitalista sin ahorro. Vos si hoy ahorrás en pesos y lo pones en un plazo fijo, te lo come la inflación, porque te pagan menos tasas que lo que da la inflación, o sea, vas perdiendo, dejas la plata a trabajar en el banco y cada vez tenés menos, te la come la inflación.
Si sos industrial, comerciante, lo que fuere, y tenés stock, no lo vendés, entonces, ¿para qué vas a comprar stock si no lo vas a realizar? Y si tenés dólar, lo tenés que vender, porque esto, muchacho, no llegas a fin de mes y tenés que desahorrar.
El canuto que tenías en dólares lo estás vendiendo para pagar…
Ellos lo festejan eso. Muy bien, ellos pueden festejarlo, pero el tema es que la economía está desahorrando.
Vos tenías mil dólares y te quedan 700. Si ellos festejan una economía que desahorra, esto está terminado.
No hay posibilidad en el sistema capitalista de generar un sistema virtuoso sin ahorro.
Te lo está diciendo una economista peronista y por eso nosotros trabajábamos con Superávit Fiscal Primario.
El ahorro… No esa es la vieja frase, el ahorro es la base de la fortuna.
Sin ahorro no hay sistema capitalista, porque vos tenés que acumular el trabajo de alguna manera.
La manera que vos acumulás energía un ratito es con una batería.
¿Cómo acumulas trabajo? Con capital. La contracara del capital es el ahorro líquido de alguien o lo que fuere.
Finalmente, ahorro e inversión es una igualdad, una contable. Por lo tanto, sin ahorro no hay inversión.
Si estos muchachos festejan que la economía argentina no tenga incentivo al ahorro y algunos sectores, sobre todo los medios altos, estén desahorrando, esto va al fracaso.
Pero esto se asocia con otro tema. Si vos me preguntas hoy qué es lo único que estás rindiendo son los papeles del Tesoro, los papeles del Estado.
Compraste a 25 y llegas a 50, no importa. Ahora, ¿no se suponía que venían a priorizar el sector privado? Y lo único que funciona es el Estado.
Entonces, está totalmente loco esto. O sea, los tipos que venían a decir vamos a premiar el sector privado, no lo dejan ahorrar, lo hacen desahorrar y lo único que anda bien son los papeles del Estado.
Bueno, hay algo acá que está totalmente… Algo no está funcionando.
¿Vos sabés que anoche, insólitamente, porque yo casi nunca miro tele, pero haciendo Zapping me encuentro con Domingo Felipe Cábalo? Sí.
Yo creo que te leyó. Casi que se hizo moreni. Te lo juro, ¿eh? No te estoy jodiendo.
Cábalo anoche dijo en televisión algo que quizá vos podés suscribir.
¿Querés escucharlo? Sí, cómodo. Escuchalo. Tiene que conseguir el gobierno que la recesión lleve a los productores de bienes y en ese sentido es muy bueno que mañana se reúna con los CEOs de las empresas alimenticias y de otro tipo de empresas.
Yo les recomendé que se reúna también con los laboratorios farmacéuticos y les haga un planteo en el sentido de que se han liberado todos los precios, lo cual es algo que siempre quiso el sector privado y es muy necesario para una economía que funcione bien normalmente, pero no puede ser que las empresas aprovechen eso para pegar un saque a los precios exagerado.
Tienen que colaborar para que el gobierno pueda bajar la inflación sin provocar tanta recesión.
Es genial. ¿Entendés? Él celebra… Vos viste que este es un gobierno que libera todos los precios menos el salario.
En esto estamos de acuerdo. Sí, sí. Hoy está regulando a través de la Secretaría de Trabajo.
Lo único que regula es el salario. Y los vuelos comerciales de los gobernadores, algo así.
También. Exactamente. Pero igual empezó con los vuelos. Empezó con las costumbres.
Mirá, hicieron en estas últimas semanas dos o tres cosas que es típica de políticos populistas, como le decían ellos antes.
Una es ir a Expo Agro. Viste que no estaba yendo a ningún lado.
Fue al colegio. Tema aparte, después vamos a charlar. Y la hermana ayer apareció en el show más caro.
1.800.000 pesos salía el cubierto en el show que fue Carina Milay, Anoche de Luis Miguel, para decirlo con todos los datos.
Son las típicas cosas que caes en la tentación, porque el poder te da acceso a un montón de cosas que hasta ese momento no tenías.
Él quizá no tiene intención ni nada, pero ella no deja de ser.
A mí me contaron una escena de uno de los reportajes que dio en la última campaña, donde ella llegaba con tres o cuatro pares de zapatos.
Carina, mirá lo que me compré. Le mostraba con periodistas ahí adelante.
El poder te da eso. Pero bueno, ¿cómo ves vos a Cavallo en todo esto? Bueno, Cavallo algún día tiene que contar la génesis del plan de convertiría.
Que es tuyo, no, que era de Curia. Ya se murió el doctor Curia.
Nos vamos muriendo todos, pero tiene que quedar la verdad histórica.
Él tiene que explicar de dónde salió la idea, esa tesis que dicen que tenía Aliendo, que presentó por un doctorado, nunca me la mandaron, dice que hay ahí en un doctorado que él estaba haciendo, pero que es abogado, que tampoco es economista, no es para…
Entonces tienen que empezar a explicar cuál es la génesis del plan de convertiría para que quede la verdad histórica.
Le preguntaron a Cavallo lo que yo dije, y dijo, sí, tengo idea de que había un economista que se llamaba Curia en el gobierno.
¡Qué calidura! Sí, claro. La verdad que no corresponde a uno de los maestros de la economía del Perón.
Bueno, pero ahora te está robando la regulación de precios. Pero esto implica que Cavallo, después de tantos años en el Ministerio de Economía, empieza a comprender el funcionamiento, no porque haya sido empresario, no porque ya pasó su vida para poder ser empresario, nunca lo fue, pero empieza a entender cómo funciona la economía argentina y cómo se tienen que conversar los precios, que es lo que hacíamos nosotros.
Él dice, hay que llamarlos a conversar, es lo que hacíamos nosotros.
La diferencia es que no hay que llamarlos por sector y a todos juntos, hay que llamarlos de a uno.
Yo, como hacía, siempre había uno o dos punteros de cada sector.
Si vos sabrás del sector de medicamentos, uno es Roja de Mérceles, el otro es Vagó, no hay mucho que ver.
Sí, obvio. Las multi, en este caso, no son las que definen.
Es muy difícil que en un sector, en el ámbito automotrivo, llamabas a Ratazzi, porque los otros son empleados.
No es que vos decís, viene el presidente de la Ford y viene un empresario, viene un empleado de la Ford que trabaja de presidente.
Esto no lo estoy menoscabando. Pero no es su plata. Claro, no es su plata.
Entonces vos tenés que buscar a los dueños, después hablas con el que el dueño te decida.
A veces quiere venir el dueño y a veces te mando al cadete, le dices, no hay ningún problema, mientras que él venga seas vos.
Y ahí ordenas, conversas los precios, que es lo que hizo el peronismo.
Después ellos empiezan a tergiversar y dicen cosas y hablan. Es necesario hacerlo.
Como se conversan los salarios en una paritaria, se deben conversar los precios.
Si vos conversás los salarios, ¿lo aprobás o no lo aprobás? Vos se sientas.
El secretario general con el puntero del sector. Siempre está el puntero.
Cuando se juega de verdad va el dueño y si no, el que el dueño decide.
Si se conversan los salarios, y para eso están las paritarias, ¿por qué no vas a conversar los precios? ¿Qué es lo que está recuperando Cavallo ahora? Cuando él hizo su programa…
Tarde, pero se está haciendo peronista, digamos, por decirlo de alguna manera.
¿Sabes qué le pasa? Lo está entendiendo. Él hizo una pauta monetaria tan rígida, la convertibilidad, que de ese tema íbamos a una inflación creciente al principio, perdiste competitividad y después no tenía otra alternativa que ir a la deflación.
Entonces no era un tema. Ahora cuando él no tiene un tipo de cambio rígido, salvo que lo está haciendo rígido, mira, porque te está secando la plaza, entonces va a la baja.
En vez de rígido, va a la baja, que es lo que hablamos antes.
Pero no importa. Él sabe que esto no va a aguantar y dice, mire, muchacho, aflojemos rápido a la inflación para que el presidente pueda estirar un poco más esto.
Claro, no hay manera más que conversándolo. Pero no es la lógica de Milael.
Milael es un anarcocapitalista. Ahora, este anarcocapitalista que vos describís siempre tanto, mi pregunta es, ¿cómo es que no le hace ruido en su propia cabecita cuando se mete a determinar que no hay plata para aumentar los salarios? Porque él lo que dice…
Porque no quiere homologar siquiera, por ejemplo, el convenio de camioneros.
Ninguno, ninguno. Él dice el marco teórico de él, el anarcocapitalismo, que en realidad el salario se tiene que adecuar a la productividad de la economía.
Como la productividad de la economía argentina… Está para atrás. Bien, entonces no tenía alternativa.
El salario tiene que bajar. Y qué dice de los precios.
Los precios suben y, bueno, que nadie pueda comprar y listo.
Bueno, es que es lo que él dice hay que aguantárselo hasta que esto dé la vuelta.
¿Va a dar la vuelta? No. Esto está terminado. No hay ninguna posibilidad de que esto, en este esquema, sea exitoso.
Y en realidad se te está acercando el futuro a hoy.
No sé cómo estará la Ruta 9. Yo vi la cosa la mañana, que los muchachos empezaban a caminar.
Cuando los muchachos empiezan a caminar eso es muy importante. Patricia Burlich recibe, como recibí yo, la noticia de que la CGT Villa Constitución, que no es solo la UOM, decidió salir a hacer lo que hay que hacer.
La cortan la ruta. Y además, perdón, la cortan hoy la ruta, que ustedes saben todavía está expuadro, con lo cual, con la consecuencia de que había un montón de gente, no es solamente…
Ahora, ¿cómo sigue? Patricia Arruda entonces frunce el ceño, se viste de gendarme, qué sé yo, y da la orden al comandante de Gendarmería, no me corten la Ruta 9.
Listo, señora ministra, o como se llame, no hay ningún inconveniente.
Mañana la Gendarmería va a trabajar. El comandante de la Gendarmería llama al comandante de la zona.
Está bien, que estará… Ahí está la prefectura, en Villa, en Zárate está la prefectura y la Gendarmería para la ruta.
Ponen en alerta a toda la fuerza. ¿Qué hizo la CGT de Villa Constitución anoche? ¿Qué te imaginas? Hoy va a cortar la ruta.
¿Qué hizo la CGT anoche? A ver, vamos a reflexionar. ¿Qué hacen? Vos sos secretario general de la UOM, vos de Comercio, vos de esto.
Muchachos, mañana a cortar la ruta. ¿Qué hacemos a la noche? A la noche hacen un asado extraordinario.
Y entonces llaman al comandante de Gendarmería y al jefe de la prefectura.
Le dicen, muchachos, tenemos que conversar, vamos a comer. Y hacen un asado con molleja, con chori, con todo.
Menos el cristal está todo. Está bien, porque eso ya sería una exageración.
Y aparte es feo. Sí, y aparte no pasa nada. Y entonces vos le decís, muchachos, mañana tenemos que salir a caminar.
Bueno, pero escúchame. Che, ¿cómo está tu sobrino que trabaja en la Gendarmería? Yo yo la están pasando mal, qué sé yo, qué sé cuánto.
Y empezamos. Y empezamos el diálogo. Con lo cual los factores de poder también es el movimiento obrero.
Ese gendarme hoy que tiene que ordenar la represión, le va a ser muy difícil.
Entonces empiezan a mover los gendarmes. No, porque este comandante no quiso, por el otro.
Y llega un momento que se le empieza a desarmar. Cuando el movimiento obrero empieza a trabajar, y ya empezó, porque se lo venimos avisando hace dos semanas, impidan que Villa Constitución se ponga a caminar.
Y bueno, se empezó a caminar. Bien, esto cada vez, cada semana que vengo, nos vamos a empezar a dar cuenta.
Mira, hay otro programa que a veces me junto con un pibe de la juventud radical.
El pibe de la juventud radical cuando me escuchaba decir esto, no, pero los cuatro años, pero esto, la República, viste cómo son los radicales.
No, no, los radicales a mí me… Bueno, y entonces ya ayer…
Ya dejaron el republicanismo de lado. Bueno, ya ayer empezó el pibe.
No, no, los radicales tenemos que pensar un plan de gobierno, porque no puede ser que el único que esté pensando en plan de gobierno sean los peronistas.
Ya se empezaron a poner en marcha. Esto no tiene solución dentro del marco teórico de Milei.
Ahora, si le ponen una capellina a Milei, y gobierna otro, y dicen que está Milei, pero las ideas son otra cosa.
Bueno, por ejemplo, hoy el ministro del Interior dijo qué barbaridad que hayan bajado el impuesto a la ganancia, se quejó el fondo monetario, se quejaron los soberanismos multilaterales, nos quejamos todos.
Mi ley lo aprobó. Mi ley lo votó. Y si estabas vos le decías eso.
Obvio. El periodista no le dijo nada. Entonces, claro, que el tipo se quejaba y decía, pero si lo votó Milei.
Era lo obvio que tenía que decir el periodista. ¿El periodista quién era? López Obrador.
Qué raro que no se acordó. No se acordó. Radio Rivadavia.
No se acordó. Entonces, vos le decís, bueno, muchachos, paren un poquitito.
¿Qué le pasó al ministro? Tampoco se acordaba que Milei votó.
Porque tenía que explicar por qué le van a seguir sacando plata al sector privado.
Porque los trabajadores de este país son la mayoría del sector privado.
Todos los que estamos acá somos sector privado. Bueno, escuchame una cosa.
Todo muy lindo. Acá venís en general a almorzar, hoy se ve que solamente tomaron un café, pero tengo entendido que desayunaste.
¿Ayer? No, es todo el día. Con Gildo y Fran. ¿Sabés por qué no desayuné hoy? Desayunaste con Gildo y Fran y con Pichetto.
Sí, sí. ¿Y yo dónde? ¿Y a mí cuándo me llevas? Y yo te voy a llevar a vos.
Porque me hubiera divertido bastante. No, por la rama femenina te voy a llevar a vos.
¿Qué rama femenina? ¿Qué foto? A mí me llevas, yo ya te dije, a mí me podés poner de candidata a presidenta, no tengo ningún problema.
Y si después sí, ¿y por qué no? Y si vas a salir de la rama.
Y alguna de las ramas va a salir a candidato. Escuché una cosa, vamos a las noticias y cuando volvemos me contás qué parecías que hay con toda esta gente tan progresista.
Bueno, bueno. Y vamos a empezar explicando por qué no desayuné hoy.
Y por qué no hoy, exactamente.
Columna de Guillermo Moreno
7 marzo, 2024
Radio 10