Desde un prototipo de una pulverizadora hasta las ampliaciones de plantas de fitosanitarios y maquinaria agrícola estuvieron en el foco del interés de la muestra que se realizó en San Nicolás; es una apuesta de un sector que quiere crecer, más allá de las dificultades que presenta la coyunturaTexto Belkis Martínez y Mariana Reinke enviadas especiales Foto Marcelo ManeraSAN NICOLÁSás allá del ruido político, Expoa- gro 2024 dejó un sinnúmero de novedades tecnológicas y anuncios de inversión de diferentes empresas del agro que dan cuenta del interés de la actividad por innovar y apostar al mediano plazo.Una de esas novedades fue un prototipo presentado por Metalfor que se robó la atención de cientos de productores. Se trata de VAX, un vehículo autónomo multipropósito, en cuyo desarrollo participaron la firma cordobesa, Marinelli Technology, y fue diseñada por José Luis Denari.Desde Metalfor explicaron que la idea del vehículo es que este pueda hacer la pulverización y fertilización de forma robotizada. «Es un vehículo no tripulado. Es un «concept», que el día de mañana puede usarse para siembra, actualmente «no existe otro», explicaron los expertos.»Hoy en día la maquinaria agrícola tiene tecnología muchísima más sofisticada que la que encontramos en la calle, es decir, los vehículos autónomos por una cuestión de seguridad todavía no existen, pero si te subís a cualquiera de estas máquinas grandes ya tienen piloto automático. O sea, uno define el recorrido, es mucho más fácil resolver, si bien es complejo, es más fácil en el campo donde los obstáculos no existen, no hay vidashumanas en juego. Entendemos que cada vez más la autonomía de la inteligencia artificial van a ser más preponderantes en este desarrollo», dijo Eduardo Borri, presidente de Metalfor.El diseño se realizó entre octubre y febrero pasado. «Este es un vehículo tractor. Hoy puede ser de utilización, de apoyo y en un futuro de siembra. El concepto es revolucionar o cambiar la idea de la maquinaria agrícola en términos de autonomía. Si ves la tecnología que hay en el campo, en la ciudad todavía no está funcionando por una cuestión de precaución y seguridad, pero todo eso ya está. Hay gente que ha querido comprarlo, pero todavía no lo podemos vender. Va a llevar un tiempo, seguramente va a tomar un par de años terminarlo», precisó Borri.Fue diseñado por José Luis Denari, quien se encargó de la parte estética de la máquina. Según mencionó, ya había diseñado una cosechadora de la firma. «Para el diseño, me inspiré en un drone, el concepto es eso, y el uso del logotipo de Metalfor está hecho de esa manera para que se vaya abriendo hacia los laterales. La máquina y el concepto general tenía un drone arriba, porque es quien mapea el potrero y después vuelve y le da la información a la máquina», agregó.Denari sostuvo que la Argentina está a la par de Estados Unidos y Europa en este tipo de tecnología. «Eso en la industria automotriz no existe, mientras que en el campo estatecnología es la misma que se está aplicando en otros países.», afirmó.En la firma aseguran que este vehículo tiene menos materiales que una máquina tradicional, porque no tiene cabina, y hay un montón de componentes diferentes.Denari, quien manejaba la máquina con un control remoto, explicó que esta es bidireccional, es decir, como la trompa es igual a la cola, puede trabajar de ambos lados; por ese motivo, las luces se transforman en rojas si la máquina está yendo para el otro lado.En el tecnódromo, donde estaba el prototipo funcionando, Nicolás Marinelli, contó que fue el encargado de realizar la parte de la inteligencia artificial y robotización de la máquina. El joven se considera autodidacta, igual que su padre, Sergio Marinelli.»Realizamos toda la automatización del equipo, por eso la presentamos en conjunto con Metalfor», resumió. La empresa había trabajo en el desarrollo del RUAS 160, el helicóptero no tripulado de la firma Cicaré. «Siempre nos inspira la parte agrícola y todo lo que tiene que ver con la robotización y automatización para poder ser sustentables y más eficientes en la agricultura de precisión», planteó Marinelli.Marinelli Technology, la firma que se dedica a la automatización y robotización, se encargó de la parte interna donde están los módulos de los pilotos automáticos y los sistemas de comunicaciones. «Trabajamos por pasión y por quererdesarrollar, renovar y buscar resolver problemas a la sociedad y que todos en el sector podamos crecer. Ni mi papá ni yo tenemos un título, pero nos apoyamos en los profesionales a la hora de los desarrollos», afirmó.InsumosPor otra parte, con el foco puesto en expandir su portfolio de productos de agroquímicos en el país, la compañía Atanor invertirá en los próximos cinco años un total de US$90 millones. Con una historia de 85 años, tiempo atrás decidió incursionar en esta industria. En rigor, hace 25 años que esta empresa forma parte del grupo Albaugh, fundada en Iowa por un agricultor, Dennis Albaugh, donde su eje es ofrecer una paleta de soluciones y agroquímicos para productores.»Los desafíos en la Argentina son seguir añadiendo productos a nuestro portafolio para que los agricultores puedan comprar no solo herbicidas, sino también insecticidas, fungicidas, porque estamos aquí para ayudarlos. Ese es el próximo paso. Somos una compañía que se centra en el desarrollo y la creación y, si querés desarrollar y hacer crecer tu negocio, tenés que, continuamente, invertir en tu negocio. Por esto, cada año invertimos en el país. Algunos años más que otros, y a veces menos, no por nuestra propia voluntad, sino por problemas económicos y financieros del país», dijo a la nación Kurt Pedersen Kaalund, CEO Global de Albaugh.En la actualidad, la firma posee en el país tres plantas de las 12 que tienen en el mundo. «Nuestra idea es seguir invirtiendo en tecnología y servicios. Una de las tres plantas está en Río Tercero; ahí en los últimos tres años llevamos invertidos más de US$40 millones. Este año vamos a invertir 20 millones hasta llegar a los US$90 millones. El objetivo es que esa planta no solo abastezca el mercado local de 2,4D, con toda la tecnología, sino también para exportar a Estados Unidos. En cuanto a las restricciones macroeconómicas, el año pasado hubiésemos invertido mucho más, pero no podíamos importar los servicios y la infraestructura que no estaba en el país tampoco la podíamos importar ni desarrollar. Y eso se nos demoró», señaló Nicolás Winschel, presidente y CEO de Albaugh Latam South.Aunque prefirió no realizar comentarios sobre la política local, Pedersen Kaalund dijo que «los agricultores en la Argentina están haciendo un trabajo fantástico y necesitan una economía mundial abierta, donde puedan exportar sus cultivos».»Necesitamos tener la capacidad de importar equipos e insumos básicos que no podemos comprar en el país para la producción y la generación de valor que tenemos con nuestros productos, y necesitamos importar servicios», enfatizó.En cuanto a si piensan abrir el abanico del negocio e ingresar en la industria semillera, el directivo de origen dinamarqués lo negó. «Somos 3000 personas. Estamos en el 8° lugar en la industria global, vendiendo casi US$3 billones. Creemos que la clave para nuestro éxito es lo que llamamos el mantra de Al- baugh: ?priorizamos, simplificamos y ejecutamos?. Priorizamos en la protección agroquímica la calidad, el servicio y el precio competitivo para el agricultor.», aclaró.Más inversionesEn tanto, la multinacional de la maquinaria agrícola John Deere anunció en Expoagro una inversión de US$15 millones en su planta de PLA by John Deere en Las Rosas, Santa Fe, donde produce pulverizadoras y sembradoras.»La inversión que anunciamos en Expoagro es para la ampliación de la capacidad productiva de PLA by John Deere, la planta que se dedica a la producción de pulveriza- doras y sembradoras. La planta incrementará aproximadamente un 50% su posibilidad de fabricación a través de un cambio significativo en la unidad, que significa casi una fábrica nueva con nuevos edificios, línea de pintura y montaje, mejoras en procesos, sistemas y logística», dijo Rodrigo Weisburd, gerente de Asuntos Corporativos de la empresa a LA NACION.En este contexto, el presidente de John Deere Argentina, Sergio Fernández, remarcó el dato de que la firma lleva invertidos US$265 millones en los últimos 10 años y su visión a 2028 apunta «a sostener este ritmo».*EMIRATOS ÁRABESEn una sala abarrotada de embajadores y diplomáticos, participó Saeed Alqemzi, el embajador de emiratos Árabes Unidos en la argentina. Su vestimenta sobresalía por sobre el resto y se convirtió en la atención de la gente que asistió a la expoagro. el diplomático dijo a la naCion que en el país de Medio oriente le «abren los brazos a todo» lo que se quiera exportar y que «están del lado de los argentinos». Tras el recorrido, además se reunió con el secretario de Agricultura, Fernando Vilella; el presidente del Consorcio de Exportadores de Carnes ABC, Mario Ravettino, y sus pares de otros países. «Me llama la atención esta industria, alrededor de la producción agropecuaria, sobre todo la maquinaria agrícola y la investigación respecto del desarrollo de las semillas», dijo.
EXPOAGRO Innovación tecnológica e inversiones con la meta en el mediano plazo
16 marzo, 2024
La Nación