Bueno, vamos a repasar un poquito antes del cierre con Darío Rubinstein, que es economista, y con Pablo Tauzon, analista político, lo que estamos viviendo en este momento.
Por un lado, por la parte económica, Darío, por estas horas empiezan a circular algunas versiones respecto de cuál es el horizonte de expectativas en relación al tema del dólar, la canasta de monedas, más lejos la dolarización.
¿Qué nos podés decir vos de esto de la canasta de monedas, el modelo peruano? Lo que les quiero decir es que el presidente habla de competencia de monedas, que no es lo mismo que canasta de monedas.
El modelo peruano, que viene siendo exitoso desde los años 90, es que convivan en Perú el sol y el dólar.
Bueno, eso es lo que está pensando ahora el equipo económico del presidente, porque la dolarización total, como la pensaban después de la visita del número 2 del FMI, quedó ahí al costado.
Lo que se piensa es que convivan, coexistan el dólar y el peso y se puedan hacer transacciones comerciales, tanto en pesos como en dólares.
¿Podríamos decir que es una pseudo convertibilidad o una pseudo dolarización? Sí, lo que va a pasar es que vamos a poder elegir si hacemos contratos en dólares, en pesos, el dólar va a poder libremente estar en la economía argentina.
También quitar los cepos, el presidente dijo que la salida del cepo en Expo Agro lo piensa más hacia mediados de año, yo creo que es un poquito más, porque tiene que seguir acumulando reservas, tiene que esperar la cosecha gruesa y además tiene que acordar con el FMI un nuevo desembolso.
¿Por qué este nuevo desembolso? Para evitar la salida del cepo y que se desmadre la economía respecto de que haya corrida hacia el dólar.
No la va a ver ahora porque no hay pesos en la calle.
¿Por qué no hay pesos? Porque hay una aspiradora de pesos, la gente, la clase media, que tienen algún tipo de ahorro en dólares, lo están liquidando porque necesitan pagar las cuentas, los aumentos de alimentos, prepagas, transporte, tarifas, etc.
Y les doy un dato, ¿cuánto tienen los argentinos fuera del sistema en dólares? ¿Cuánto? ¿Se lo digo? 272 mil millones de dólares tienen los argentinos.
Sí, algunos te estarán mirando y te dirán yo no tengo ni un dólar.
Ni un solo dólar. Por eso los promedios dicen tan poco acerca de cómo estamos.
Lo que nos dice es que los argentinos en general pensamos en dólares, guardamos el dinero en la caja de ahorro, abajo del colchón, ¿por qué? Porque no confiamos en la moneda que tenemos.
Dejános cerrar también con Pablo, que ya estamos con poquito tiempo.
Tu mirada, Pablo, de este momento. A ver, Milev hoy tiene en frente dos frentes, valga la redundancia.
Uno es la casta, llamémosle el frente con los gobernadores, el frente con la política, que un poco con el acuerdo, que me parece que la pregunta ahora es con qué se come el pacto, ¿no? ¿Qué es el pacto de verdad más allá del anuncio? Y el otro, lo que vimos al principio, lo programas con este hombre de la ferretería, que es el frente de la calle.
Yo creo que el que más debería problematizar a Milev es el frente de la calle, mucho más que el frente de la casta, visto la deslegitimidad que tiene la política en esta época.
Creo que en ese sentido él juega casi solo. Y su único enfrentamiento, que él lo marcó, el único colectivo, llamémosle así, que está en contra o que le disputa poderes los gobernadores.
Las coaliciones no existen más. ¿Qué tenemos que mirar? ¿El éxito del pacto de mayo o que pueda pasar la ley bases? ¿Qué es más importante? La ley bases, ¿no? La ley bases.
O sea, quiero decir, está atada una a la otra. Me parece que es una especie de máquina conceptual alrededor de una cosa que necesita de verdad que es, frente al fondo y frente a los inversores extranjeros, también es decir cómo blindo mi programa, más allá de mi voluntad.
¿Qué es esto además de apretar, de pisar la manguera de la emisión? ¿Qué es además de cerrar organismos públicos emblemáticos del kirchnerismo? Hay algo y un plan atrás y con eso necesita, ya vemos, un plan de estabilización política que solo le puede dar en este punto al Congreso.
Perfecto. Pablo, muchas gracias por haber venido. Darío, lo mismo. Nos han ayudado un montón y es momento de darle la bienvenida a él, porque son las cuatro en punto.
¿Cómo estás, pelado? ¿Cómo andan, chicas? Marina, Débora, ¿cómo están?