Pedíamos que Expoagro 2024 fuera un puñetazo en la mesa, un grito del interior profundo remarcando que «es por acá, y es ahora», el slogan de una muestra histórica. Fundacional, por muchos aspectos. Desde lo político hasta los contenidos.Veamos.Hubo una participación tremendamente activa del gobierno nacional. Empezando por la presencia del propio presidente Javier Milei, quien fue recibido con muestras muy efusivas de la simpatía que despierta en el agro. Había pedido hacer una presentación a puertas cerradas, en una sala de conferencias para cien personas. Entró, se sentó y disparó: «ustedes son héroes». Y agregó enseguida: «aquí está lo que va a sacar al país de la decadencia». Puso la vara muy alta.Y aunque no hizo ningún anuncio específico para el sector, en particular sobre el tema retenciones (que es donde se centra el reclamo) dejó convencida a la audiencia de que se inició otra historia.Fue cuando repasó lo que hizo el gobierno en estos 90 días, con el objetivo de alcanzar el equilibrio fiscal en el menor plazo posible. «Logrado el déficit cero, podremos empezar a reducir los impuestos».En otras circunstancias, esto hubiera sonado como meras intenciones, porque los impuestos nunca han bajado. Pero flota en el ambiente la sensación de que esta vez va en serio. Esto recién empieza y queda mucha tela para cortar, pero se abrió la Caja de Pandora y quedaron a la vista todos los vicios. Sabemos que en el fondo de la mítica caja anida la Esperanza.Y esa esperanza en la acción política se reflejó en la presencia muy intensa de varios de los principales ministros.Empezando por el de Interior, Guillermo Francos, tremendamente activo desde el primer día. No es un hombre con relación histórica con el campo, pero tiene una fuerte convicción de que «es por acá». Lo machacó en cada intervención.Se interesó por las novedades y remarcó el valor de semejante exhibición de la potencia del entramado agroindustrial.La visita de la canciller Diana Mondino fue otro impacto fenomenal. Invitó a decenas de representantes diplomáticos, a quienes hizo desfilar por toda la muestra, segura de que es necesario empujar en el mundo la idea de que en la Argentina se está amasando una forma nueva de producir alimentos, fibra y bioenergía. Exhibió un profundo conocimiento del sector, tomando por su propia cuenta la explicación de los productos que se exhibían. Hablando en distintos idiomas, con solvencia y energía, le dedicó todo el día a la muestra. Sabe de economía.Está convencida de que a la hora de generar divisas, «es por acá».Fernando Vilella, secretario de Bioeconomía, instaló a todo su gabinete en Expoagro. Una presencia permanente a lo largo de los cuatro días de la muestra, con sus funcionarios participando de decenas de paneles y encuentros con productores y empresas.Con varios puntos culminantes en materia de contenidos, como la presencia de su jefe de gabinete, Pedro Vigneau, en el lanzamiento más fuerte de la Expo: el del plan de Conectividad Rural que empieza a «iluminar» 500.000 hectáreas en Pergamino y Rojas. Tendrán conectividad urbana en el medio rural. Telecom le encontró la vuelta al complejo entramado que cambia la historia. Todos sabemos que las nuevas tecnologías solo pueden desplegarse a pleno si hay conectividad.Pero lo que se puso por delante de todo es el tremendo impacto social de este avance.Miguel Dover, ex presidente de CREA y productor en Pergamino, y Nicolás Gear, empresario de Rojas titular de la Asociación de Semilleros Argentinos, remarcaron precisamente lo que significa la conectividad para la gente que vive y trabaja en el campo. «Esto salva vidas», resumió Dover.Y pasaron muchas más cosas, y lo contamos en esta edición de Clarín Rural.Pasen y vean.
Y era nomás por acá…
9 marzo, 2024
Clarín